30 de Septiembre de 2008

No puedo escribir un suspiro. Ni decirte cuanto te admiro. Pero te quiero, y demasiado. Sé que muchas veces dije que todo esto no iba a pasar, y lo juré- si, lo juré- pero hoy rompo mi promesa. Quiero, puedo y hasta creo que debo enamorarme de vos. Ojalá todo salga como yo espero, que seas vos mi dueño sin importar los demás. Unos días te pienso, otros te olvido. Pero veo que vos, no sé. No me quiero ilusionar de algo que no es real. Pero tengo la certeza de que algo va a pasar. No tengo fechas para recordarte, le busco un sentido a todo esto. Mis noches son más largas que lo que hoy puedo escribir. Y ese día te vi... tan dulce y sincero, fue como tocar el cielo. Mi reloj se detuvo en tus ojos. La verdad, tenés los ojos más dulces que jamás había visto. Sos el amor de mi vida, no sé si fue casualidad, pero así lo sentí cuando te vi. Me gustabas desde mucho antes, y no me lo esperaba. Y antes de que pase más tiempo, tengo que decirte que tanta calma me desespera, por eso el posteo de hoy. Jajaj, parezco una loca seguro. No corras si te llamo de repente, no te vayas si te grito piérdete...